Tomada de la edición impresa del 29 de diciembre del 2009 El Telégrafo
Las personas que se beneficiaron con los cursos de manualidades aprovecharon la época navideña para hacer objetos relacionados con la celebración.
Datos
La clausura de los cursos de formación dictados a los grupos de atención prioritaria fue el pasado 18 de diciembre.
Los beneficiarios pueden acceder al Ministerio de Inclusión Económica y Social para obtener un adelanto del bono de desarrollo humano y a los créditos del Banco Nacional de Fomento para empezar un negocio.
Infórmate
Los interesados en los cursos de formación profesional pueden acceder a la página web: www. secap.gov.ec en el link (opción) que dice Capacitaciones.
Llamar a la institución al teléfono 02 2467-547.
Alrededor de 10 mil personas han accedido a los diferentes cursos que ha impartido el Secap en 2009.
Desde hace tres meses 20 mujeres de la cooperativa Juan Montalvo, ubicada al norte de la ciudad, se capacitan en corte y confección para ayudar al sustento de sus familias.
Este es el caso de Margarita Alvarado, madre de dos hijas de 9 y 12 años, quien desde hace un mes acondicionó un espacio en su casa para exhibir sus creaciones. “Hago ropa deportiva, además de vestidos para dormir y a la gente le gusta”, mencionó la costurera.
El costo de las pijamas va desde 8 hasta 10 dólares, dependiendo del modelo y la talla. Aunque Alvarado inició su negocio sola, las 20 mujeres que se capacitaron con ella tienen previsto abrir una microempresa para confeccionar al por mayor sus creaciones.
Por esta razón esperan que se haga realidad la opción de financiamiento que el Gobierno ha ofrecido, mencionó Alba Inca, coordinadora de varias comunidades del norte de la ciudad.
Como este grupo de mujeres, más de 10 mil personas han asistido a los 535 cursos de capacitación impartidos por el Servicio Ecuatoriano de Capacitación Profesional (Secap).
Este centro de formación imparte conocimientos en diferentes áreas como la industrial, construcción, artes gráficas y electricidad; salud, comercio y servicio, que incluyen oficios como corte y confección, gastronomía, manualidades y enfermería, entre otros.
Las capacitaciones se imparten en cada comunidad para evitarle a los participantes el gasto de transporte, indicó Carlos Medina, encargado del programa de capacitación a grupos vulnerables del Secap.
“Las personas que deciden participar en este programa solo necesitan la copia de la cédula de identidad y la predisposición para aprender. El Secap pone todos los recursos necesarios para realizar los cursos”, dijo Medina.
Los talleres se dictan bajo la modalidad de módulos, es decir que una persona cumple entre 3 y 5 etapas, dependiendo del oficio que estén aprendiendo.
Las capacitaciones concluyen con un curso de microempresa que sirve como base para los negocios que quieran emprender, destacó Medina.
El objetivo central de esta formación -según el funcionario- es que los participantes estén aptos para iniciar nuevos negocios con los que puedan producir y generar ganancias para mantener a sus familias.
Por ejemplo, Mery Chatón perfeccionó sus conocimientos en tejido y actualmente elabora blusas y escarpines que los vende entre sus vecinos y familiares.
Las blusas tejidas tienen un costo de 10 dólares cada una y este ingreso es un complemento del presupuesto familiar, señaló la beneficiaria.
Pero las mujeres no son las únicas que pueden acceder a las capacitaciones, una muestra de ello son los 16 hombres pertenecientes a la asociación Fertisa-Profesor Calle.
535 cursos en diversas áreas y oficios ha brindado la institución durante el
presente año
Este grupo, conformado en su mayoría por jefes de familia, se capacita en electricidad. “Con esta preparación estamos aptos para hacer instalaciones residenciales y queremos seguir capacitándonos para poder conseguir mejores ingresos para nuestras familias”, manifestó William Ortiz, miembro de la agrupación.
Pero el Secap no solo funciona en Guayaquil. Ha llegado a diferentes sectores del país, como Puerto El Morro, provincia del Guayas, donde se capacitaron 20 mujeres.
“Nos enseñaron a utilizar lo que la naturaleza nos da, por eso aprendimos a hacer artesanías con conchas y a realizar diferentes platos típicos con mariscos y cocteles con las frutas típicas”, mencionó Carla Lino, habitante de la localidad.
Las mujeres de Puerto El Morro vinculadas con el proyecto aspiran a convertir su sector en un lugar con potencial turístico.
“Queremos incursionar en el turismo comunitario, pero necesitamos apoyo para acondicionar nuestras viviendas y recibir a los turistas”, afirmó Lino.
Las capacitaciones para 2010 aún no cuentan con un cronograma establecido; se espera que el Ministerio de Relaciones Laborales disponga la forma de seleccionar a quienes se beneficiarán de los futuros cursos.
“Se ha planteado que se agrupará a las personas según sus capacidades”, destacó el funcionario del Secap.
Carlos Medina, Funcionario del Secap
“Las personas que deciden participar en este programa solo necesitan la copia de cédula y la predisposición para aprender”.
Carla Lino, Habitante de Puerto El Morro
“Queremos incursionar en el turismo comunitario, pero necesitamos apoyo para acondicionar nuestras viviendas“.
Link: www.ticsdemanabi.net
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